El miedo nos inunda y la oscuridad nos acecha.Somos presos de nuestros temores cautivos, vivimos atrapados y caímos víctimas del terror subjetivo. No podemos escapar a las sombras, ellas son parte de nosotros y nosotros de ellas.
“¿Cuál es tu nombre? Mi nombre es Legión, pues somos muchos”. Marcos 5:9.